A veces revelar da mayores satisfacciones que la del trabajo bien hecho, o saber que se ha colaborado en convertir los sueños de un cineasta, o un videoartista en trazas de plata sobre celuloide.
Una de esas ocasiones fue cuando Lluis MaÇias nos eligió para revelar las películas que formaban parte de una de sus intervenciones. La fotografía la dirigio Elisabeth Prandi, auxiliada por Albert Muñoz. No fue fácil por la premura de tiempo y la variedad de películas a revelar.
En tres días debíamos probar y convertir películas negativas de 35mm, 16mm. Super8 y hasta del fósil viviente que ya es el 9.5mm en películas reversibles. Cada una de ellas de una marca y emulsiones diferentes, Tri-x. Orwo 54 y efke, siendo esta última desconocida para nosotros y más aún su procesado en inversible.
Fotografia de Igor Calsina.
Y el 35 no fue rodado en una cámara cualquiera, sino con la misma con la que en 1896 Eduardo Jimeno rodó “Salida de misa de 12 del Pilar de Zaragoza”
y que actualmente es parte de la colección Queralto..
De alguna manera revelar una película filmada con esa cámara, era era como estar dando la mano a los pioneros del cine, casi como hacerle los pigmentos al pintor de Altamira. Una experiencia casi única en los últimos cincuenta años, y que difícilmente repetirá nadie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario